PROCESO HISTÓRICO-INSTITUCIONAL DEL INSTITUTO NACIONAL DE CIEGOS ROMAN ROSELL DESDE SUS INICIOS HASTA LA ACTUALIDAD 1933-2007

Introducción:Don Román Rosell, fue un acaudalado hombre que padeció en su vida un episodio de ceguera, de esta manera, advirtió en Argentina, la inexistencia de centros y especialistas para la rehabilitación de las personas ciegas y así la realidad que debían afrontar quienes la padecían. Decidió, entonces legar parte de su fortuna para la creación de un Asilo para Ciegos, destinado a varones desde los seis años de edad, argentinos y españoles de cualquier punto del país.Rosell, no vio concretada su obra, pero detalló todos los servicios que ésta debía brindar; residencia, alimentación, vestido, asistencia médica e instrucción, con el objeto de proporcionar medios de vida que permitan a la persona ciega, bastarse a sí misma.Es decir que la creación del Asilo para Ciegos, no fue el simple resultado de un acto de beneficencia, Don Román Rosell, consideró entre tantísimos detalles para el futuro establecimiento, la adquisición de elementos específicos, sobre todo en el área de salud, con tecnología de avanzada para la época; sala de cirugías, de oftalmología, de odontología, etc. Considerando también el área educativa, con elementos para la enseñanza de lecto-escritura braille, libros, mapas en relieve y la creación de un museo de ciencias naturales. (ver fotos )Todo esto y un sin fin de detalles, se extraen desregistran en los extractos del legado testamentario de Don Román Rosell. Recordado siempre como filántropo hacedor, en varios documentos. Y vale la pena desglosar el término filántropo, del griego “philos”: “que ama” y antrophos: “hombre” y en la Real Academia, filántropo: “el que profesa amor a sus semejantes y procura mejorar su suerte”.Se inician gestiones:En 1933 se inician las gestiones para la creación del Asilo para Ciegos, los albaceas de Don Román Rosell, con su esposa en primer orden Doña Petronila Tedín, en segundo al Dr. Miguel Mendez Trongé y en tercero al Dr. Juan Galarza, se crea un directorio y fundación para administrar la institución.En 1936 por Resolución Judicial, se establece como titular del legado Román Rosell y administradora “ad perpetuan” a la Sociedad de Beneficencia de Capital, subordinada a la desaparición de sus albaceas.Para esa época, en 1938 la Señora Petronila Tedín Uriburu, viuda de Rosell viaja a las ciudades mas adelantadas de Europa y Norte-América, a fin de conocer instituciones similares y dar forma al asilo ideado por su esposo.Con las experiencias e ideas aportadas, trabajan en la traza de planos, los arquitectos; Lanús, Woodgate y Lanús. Aprobados éstos, las líneas del edificio responden a un imponente y sobrio estilo colonial - americano, ocupando 20.000 m2, aproximadamente 2 h. sobre las 7 ½ hectáreas de la superficie total del predio, ubicado en San Isidro, Pcia. de Bs. As. (ver planos) La empresa ejecutora fue Construcciones Giannetto y el Ingeniero Civil Alfredo Irael.Inauguración:El 12 de Julio de 1941, se inaugura oficialmente el Asilo Instituto para Ciegos Román Rosell, el acto a cargo de la Sociedad de Beneficencia, es apadrinado entre otros por la señora viuda de Rosell Doña Petronila Tedín Uriburu, con presencia de autoridades nacionales, provinciales y municipales, como así también las autoridades eclesiásticas.Primeros sucesos:Con el tiempo la Sociedad de Beneficencia, aludida titular del legado Román Rosell, pasa por Ley N° 13.341 Art. 4°, a integrar la Dirección Nacional de Asistencia Social, dependiente del Ministerio de Asistencia Social y Salud Pública de la Nación.La Dirección Nacional de Asistencia Social, es el organismo que en ese entonces tenía a su cargo la asistencia y rehabilitación de no-videntes y atento a la precariedad donde dicho ministerio desarrollaba los programas de atención a las personas ciegas y dada la delicada situación financiera del Asilo R. Rosell, el 7 de Julio de 1962, se sanciona el Decreto Presidencial N° 5.166; que ordena el ingreso del inmueble como Patrimonio de Estado, tomando éste posesión del Legado Testamentario de Don Román Rosell. Y en 1967 se faculta al Ministerio de Bienestar Social de la Nación para la administración del Instituto - Asilo a través de la Secretaría de Promoción y Asistencia a la Comunidad. Se acrecienta el presupuesto de estado para la cobertura de gastos en el funcionamiento de la institución.Época dorada:En aquellos tiempos el instituto, continúa funcionando como modelo en América, con sistema de asilado/internado para residentes de todo el país (países limítrofes y otros), quienes reciben: alojamiento, alimentación, vestido, asistencia médica, instrucción y capacitación laboral.Los internos son asistidos con controles médicos periódicos y se les brindan variadas actividades alternativas; música, deportes, talleres de producción, en éstos aprenden entre otros, oficios tales como; carpintería, mecánica, electricidad, bobinado de motores, etc.Fue la época dorada de la institución tiflológica más importante del país y de Sudamérica.Cambian los tiempos:Paulatinamente se ceden espacios a instituciones ajenas a la temática de la ceguera, a sola excepción de la Escuela Nacional de Ciegos “Manuel Belgrano” para el estudio primario y profesorado de música ( en instrumentos, teoría, solfeo y musicografía braille). En 1963 se establece en el sector central del instituto y actualmente como Esc. Especial N° 505 depende del Gobierno de la Pcia. de Buenos Aires, con nuevos servicios, como Estimulación Temprana, entre otros, pero ya sin el profesorado de música.Frente a una nueva modalidad institucional, en la década del 70’ tanto el sistema de internados, como los talleres van desapareciendo.Algunos escritos, mencionan al Sr. Ricardo Vittani, como alma mater, para el resurgir del instituto, se concretan arreglos y refacciones edilicias, como también la estructura del Centro de Rehabilitación, inaugurado en 1976, con presencia del recordado director Sr. Ernesto de Los Santos, comitiva oficial de Gobierno y el Obispo Monseñor Laguna, quien bendice las instalaciones.El Centro de Rehabilitación, firma luego un convenio con la CONET (Comisión Nacional de Educación Técnica) para restablecer los primitivos talleres, que logran funcionar hasta fines de la década de los 80’.Detrás del deporte:Iniciada la década de los 90’ el instituto se centra en la actividad deportiva, como semillero de reconocidos atletas, a nivel internacional.Dentro del deporte, se da particular importancia al desarrollo del Fútbol Sala para Ciegos, pero se relegan otras disciplinas deportivas. El Fútbol para Ciegos, crece aceleradamente, su espacio en los medios gráficos, radiales y televisivos es notorio. El equipo de fútbol, viaja por todo el país, se forma luego, el Seleccionado Argentino que compite internacionalmente, con los mejores resultados en; Brasil, España, Grecia, etc. Apoyan la actividad deportiva, entendida también como actividad de rehabilitación, su órgano tutor el CONAF (Consejo Nacional de Minoridad, Adolescencia y Familia) dependiente del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, la FADEC ( Federación Argentina de Deportes para Ciegos ) y la Secretaría de Deportes de la Nación. ( -ver sección periodística- )Con la sana intención de la critica constructiva, en el Instituto, entre tanto el resto de las áreas no-deportivas, sino educativas, productivas, etc. son confinadas a la suerte, postergadas. Y pese al éxito deportivo, la década del 90’ marca la decadencia institucional. Se acrecienta el alejamiento de muchos beneficiarios, los jóvenes seguidores de otras disciplinas; atletismo, lanzamiento, natación, ciclismo, etc. no encuentran vías de desarrollo, en el establecimiento como tampoco los jóvenes con otros intereses y/o llámese la comunidad intelectual, que no encuentra espacios, apoyo, ni incentivos.Es FADEC, como Federación Argentina de Deportes para Ciegos, quien ejerce la defensa de las demás disciplinas deportivas que el Instituto Nacional, va relegando. Aunque el fuerte impacto mediático, que se desata tras cada actuación del Seleccionado Nacional de Fútbol Sala para Ciegos, mas tarde conocidos popularmente, como “Los Murciélagos” (marca registrada de FEDEC), captura toda la atención y apoyo al desarrollo de la disciplina, por parte de los organismos oficiales y otros. Afortunadamente, el saldo de los últimos diez anos dedicados al fútbol, es altamente positivo y arroja excelentes resultados. Entrado el ano 2000, el Fútbol para Ciegos en Argentina, comienza a funcionar como embajador del deporte en todo su territorio. Se realizan desde entonces exitosas exhibiciones, auspiciadas por entes gubernamentales, fundaciones, empresas multinacionales, etc. Con la misión de concientizar a la sociedad, lejana a la problemática de la ceguera. Y mostrar al mismo tiempo, nuevos caminos y posibilidades a los que si, son afectados y carecen de información.Desarraigo:En cambio la suerte del Instituto Román Rosell difiere fuertemente. El balon sonoro, comienza a rodar con fuerza en su interior, cuando la mayoría de sus talleres ya están cerrados, el sistema de internos o asilados completamente anulado y el incumplimiento de los servicios originales-fundacionales y funcionales, es absoluto. Son cuantiosos los beneficiarios que emigran, muchos de los cuales colaboran en la creación de nuevas instituciones y/o fundaciones que surgen para apaliar las tantas necesidades y explican el actual desmembramiento de la comunidad.El desarraigo fue la única opción, el tiempo ya transcurrido, aun no logra subsanarlo y aquellos jóvenes hoy hombres íntegros y muchos destacados en sus áreas, a la distancia tiempo-espacial, hablan del Rosell con marcada tristeza. Entre tanto otros, buscan los mecanismos para cambiar la historia, ya instalado el nuevo milenio.La esperanza:Desmantelado y vaciado, se afianzan sobre el predio del instituto, intereses de toda índole; económicos, políticos, sociales, etc. El riesgo real de cierre, motiva manifestaciones y protestas públicas. El abandono y decadencia, ostentaban intencionalidad. Los beneficiarios detectan además graves irregularidades, toman conocimiento de convenios oscuros con entes gubernamentales, productoras cinematográficas, canales de televisión, etc.Los beneficiarios celebran reuniones en principio con las autoridades del Instituto, en busca de soluciones que no encuentran lugar. Por el contrario, se marcan y agudizan diferencias entre los sectores inter-actuantes; dirección, profesionales, beneficiarios y otros. Intereses disímiles concluyen en una grave crisis institucional... y nace ACIRR, con ella, la esperanza...ACIRR:“Asociación de Ciegos para la Defensa y Promoción del Instituto Román Rosell”, con su acertada denominación, es fundada el 11 de mayo de 2002, esta OnG, sin fines de lucro, surge a iniciativa de un importante grupo de personas ciegas, que creen y defienden la causa de Don Román Rosell, cuyo legado testamentario, auspició la creación del Asilo para Ciegos, hoy Instituto Nacional Román Rosell. La asociación con su proyecto institucional, apoyado por instituciones tiflológicas de todo el país, crece con fuerza. Reiteradas audiencias con la presidencia del CONAF (Consejo Nacional de Minoridad, Adolescencia y Familia) concluyen con la Disposición N° 625, firmada por el Dr. Norberto Liwsky. Por la cual, se releva del cargo, luego de 10 años en el mismo, a la Directora del Instituto Lic. Maria Josefina de Rosasco. El Instituto es intervenido, se inician auditorias y sumarios. Dicha disposición en sus “considerandos”, señala además el comienzo de un nuevo ciclo histórico, proclama la reapertura del sistema de internado para las personas ciegas que lo necesiten. Compromete el trabajo por el fortalecimiento institucional, para que el Inst. Román Rosell se constituya en la mejor institución de nuestro país para atender a personas ciegas o ambliopes. Como lo fuera otrora.ACIRR es distinguida por su creación, con Declaración de Beneplácito por la Honorable Cámara de Diputados de la Nación. (ver documentos).A pesar de los fuertes cambios, las disposiciones, resoluciones gubernamentales y las sucesivas intervenciones, el nuevo ciclo histórico se hace tardío. Se inicia un periodo de evaluación y admisión de internos, pero con serias dificultades y falencias, que residen en los criterios de admisión, seguimiento y egreso. ACIRR advierte que la situación no cambia en profundidad, continúan las irregularidades y sólo se suceden cambios de autoridades, que no logran el perfil para llevar adelante un establecimiento cuya prioridad, es atender la problemática de las personas ciegas.ACIRR continúa trabajando, en busca de una verdadera re -apertura institucional a través de la re - activación y actualización de talleres, del diseño e incorporación de nuevos programas educativos, de inserción laboral, culturales, recreativos, deportivos, etc.Durante el año 2004-2005 la situación reinante fue altamente compleja, distintas personas ciegas, en emergencia social eran rechazadas sistemáticamente en el Román Rosell. Ante esto, la comunidad de no videntes reacciona, y ante la falta de respuestas de las autoridades, lleva a conocimiento público los sucesos, con serias repercusiones.Las autoridades a cargo del área (Consejo Nacional de Minoridad y Familia y Ministerio de Desarrollo Social de la Nación), luego de celebrar varias Mesas de Trabajo con esta Asociación de Ciegos, con la participación de CONADIS (Comisión Nacional Asesora para la Discapacidad), resuelven remover el último equipo de interventores. Y en el mes de julio de 2005, se designa y asume la cuarta intervención, desde la creación de ACIRR. Ésta ha demostrado hasta el momento, muy buena predisposición para con la asociación y en general para con la problemática de las personas ciegas. Pero la complejidad de la situación es tan amplia (fuerte deterioro edilicias, falta de personal, etc.) que supera las posibilidades de gestión de las nuevas autoridades. Se suma un triste y desafortunado suceso. La Asociación, es fuertemente afectada en el seno de su Comisión Directiva, tras divergencias metodológicas, entre otras y se adviene una fractura, con altos costos al crecimiento institucional y cumplimiento de sus funciones. La presidencia, algo debilitada por los conflictos acaecidos, continua adelante con la mitad de sus colaboradores iniciales, previo informe y solicitud de “intervención” a la Dirección Provincial de Personas Jurídicas de La Plata, su órgano de contralor. Luego de 18 meses se interviene la institución, tras la cual se reordena la situación y se convoca a nueva Asamblea General el 6 de Octubre de 2007, con la participación plena de mas de 80 socios activos. Del acto resulta una nueva y pujante Comisión Directiva, presidida por el Lic. Miguel Rebert. ACIRR toma el camino del dialogo con las autoridades del Instituto y se articulan algunas acciones en conjunto. Pero continua latente, el deseo del cambio histórico, y hay cuestionamientos en la comunidad, al respecto.Según las autoridades, las refacciones edilicias no pueden iniciarse por falta de presupuesto. Y este obstáculo, impide entre otros avances, la asistencia y rehabilitación de personas ciegas residentes del interior del país, aisladas geográficamente, sin centros específicos, ni profesionales especializados. No obstante ACIRR, intercede antes varios casos, que finalmente son admitidos en los servicios de rehabilitación del Instituto. Así, por primera vez ACIRR y el Instituto Román Rosell, articulan recursos de diversa índole, a favor de las personas ciegas internas y externas al establecimiento, en un nuevo tiempo de apertura y mutua colaboración.El contexto político, limita las gestiones directivas de las autoridades del Instituto Nacional, y la situación se aletarga. ACIRR no cesa su trabajo y apela a los todos los organismos posibles e instituciones tiflológicas más comprometidas. Insistiendo en el camino del dialogo con las autoridades y órganos tutores, a saber actualmente su máxima responsable, es la Secretaria Nacional de Minoridad y Familia (Ministerio de Desarrollo Social de la Nación). La constancia de ACIRR, ha incidido notoriamente, y en los primeros meses del ano 2007, las autoridades presentan a esta OnG, los lineamientos del Plan de Restauración del Instituto Román Rosell. Solicitando una devolución (análisis) y la adhesión de ACIRR, al mencionado proyecto. Inmediatamente la Asociación se pronuncia a favor de la puesta en marcha del mismo, no obstante algunas observaciones. A posteriori, ACIRR convoca a Reunión Nacional en su sede, para concertar una “Mesa de Trabajo” con importantes organizaciones tiflológicas de todo el país. El objetivo; compartir las líneas del proyecto y ampliar las posibilidades de mejora.La convocatoria fue exitosa, teniendo en cuenta que ACIRR desde sus inicios ha cumplimentado su registro y reconocimiento en diversos organismos (CENOC Centro Nacional de Organizaciones de la Comunidad, RIADIS Red Iberoamericana para la Discapacidad, Gobierno Municipal de San Isidro, etc.) Como así también, ante (FAICA Federación Argentina de Instituciones para Ciegos y Ambliopes), ingresando como miembro activo y ante FADEC (Federación Argentina de Deportes para Ciegos). Por su labor, ACIRR es elegida en Asamblea General, reconocida por organizaciones tiflológicas de todo el país, para integrar el directorio de dicha federación por el periodo 2007-2010.En la primer “Mesa de Trabajo” celebrada, se contó también, con la participación de profesionales invitados de diversas áreas. Con la visión técnica de éstos, surge la necesidad de re-elaborar un Master Plan. Como resultado, se establece un Equipo de Trabajo específico para dicha tarea. Este, liderado por el actual Presidente de ACIRR Lic. Miguel Rebert y el Arq. Carlos Maria Casano, Coordinador del equipo de asesores de la institución, trabajan empeñosamente con diversos actores y autoridades para el avance del proyecto.ACIRR, desde su creación, continúa comprometida en devolver al instituto, el brillo con que fuera concebido.Asociación de Ciegos del Instituto Román Rosell -Argentina - 2007-